La Vida Más Allá de la Sepultura
do se pretende introducir la ostensible mezcla, que sacrifica la
cualidad estilística.
Se observa un divino sentimiento de equilibrio y armonía,
sin extremismos arquitectónicos o predominio de un estilo so-
bre otro. Se trata de una genial fusión de líneas geométricas y
diferentes enlazamientos heterogéneos, pero tan sutiles, que se
desvanecen en el conjunto, como expresiones representativas de
todas las razas del mundo terreno, perfectamente enlazadas por
un común espíritu creador.
Delante de esa preciosidad arquitectónica, que es el templo
de la metrópoli, ningún alma dejará de sentir y reconocer, que
materializa en el ambiente astral, el cariñoso mensaje de mu-
chas razas que contribuyeron a su formación actual. La fusión
de los variados símbolos, relieves y filigranas, se disuelven en
una sola expresión espiritual, que permanece constante e ínte-
gra a pesar de las variedades estilísticas de sus formas externas.
La torre principal se destaca entre las otras existentes,
que miran hacia oriente, como un impresionante monumento
de belleza espiritual, esculpido internamente con caprichosos
trabajos en bajo relieve, que durante el día, se tornan brillantes
por la claridad astralina del Sol, mientras que a la noche, se
transforman en verdaderos bordados de hilos luminosos, que
adornan el alabastro eterizado de las paredes transparentes.
Esa torre principal, se eleva indefinidamente, alargándose hasta
parecer una finísima aguja, cuya punta se inunda en suaves ful-
guraciones esmeraldinas y resplandores dorados, para penetrar
dulcemente en el seno de la atmósfera de armiño, del astral su-
perior. Justamente, de esa torre principal, descienden las luces
de lo Alto, las que se acentúan durante las oraciones colectivas
de la metrópoli.
Pregunta: ¿Cuál es la función primordial del templo, en la
metrópoli del Gran Corazón?
Atanagildo: Allí se ejerce el más elevado trabajo espiritual
en dirección a la vida superior y se nos ayuda a tomar contacto
con las almas angélicas, que nos traen nuevas orientaciones e
inspiran a los administradores y a los habitantes, para que en
conjunto, colaboren en la recuperación de los espíritus infelices,
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