Ramatís

y de la ambición. ¡así, el contenido pernicioso que consiguen 
expurgar por el sufrimiento purificador a través de la carne es 
sustituido constantemente por nueva carga ruinosa, mientras 
se encadenan otra vez al círculo triste de las reencarnaciones 
físicas rectificadoras y trasponen los milenios atadas al yugo del 
karma doloroso!

PREGUNTA: – ¿Cómo identificaremos a los encarnados 

que se encuentran en las últimas existencias de agotamiento 
de venenos psíquicos?

RaMaTÍS: – Son las criaturas que, aunque acometidas por 

las más terribles enfermedades, se mantienen resignadas, pacífi-
cas, dulces y conformes. atraviesan la vida física transformando 
sus dolores en verdaderos himnos de belleza espiritual, animan-
do con su valor hasta aquellos que sufren mucho menos y que 
se conservan rebeldes y desanimados. en general, se consagran 
profundamente a las enseñanzas de Jesús, bebiendo en El las 
fuerzas que tanto necesitan para no sucumbir y no incurrir en 
nuevas faltas kármicas.

esas criaturas renuncian a las ilusiones del mundo material 

y parten de la Tierra como las aves que se liberan del viscoso 
lodazal, alzando el vuelo sereno hacia las regiones celestiales. 
aceptan el dolor como sublime oportunidad para purificarse y 
para lavar el traje nupcial que el espíritu necesita vestir después 
en las esferas paradisíacas.

PREGUNTA: – No obstante, creemos que existan espíritus va-

lerosos que prefieren intentar la expulsión de su veneno peries-
piritual en una sola existencia física más dolorosa.¿No es así?

RaMaTÍS: – Realmente, algunos espíritus heroicos se de-

ciden a acelerar la descarga de sus fluidos enfermos y tormen-
tosos del pasado y, si es posible, hacerlo en una sola existencia, 
aunque resulte muy raro que lo consigan en tan corto plazo, 
pues además de que la expulsión psíquica muy violenta provoca 
dolores atroces, ello puede causar lesiones que perturben el sis-
tema nervioso y dificulten el aprovechamiento consciente de la 
encarnación. no hay duda de que, a pesar de los grandes pade-
cimientos en las pruebas de mucho sacrificio tendientes a lograr 

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