Ramatís
de la planta, del mineral o de la sustancia tóxica extraída del
animal, y por ese motivo no violenta el organismo y sí lo ayuda,
sabiamente, a conseguir sus propias fuerzas, equilibrio y salud.
PREGUNTA: – La “alta dosis” a que os referís, ¿se distingue
de la acción de cualquier otra dosis homeopática? La medica-
mentación homeopática, ¿no es siempre la misma cosa?
RaMaTÍS: – en general, el pueblo sólo conoce la 5ª dina-
mización popular que puede suministrarse bajo menor respon-
sabilidad, porque se sitúa en el límite de la dosificación de ma-
yor drenaje y la de fondo constitucional. De la 5ª dinamización
para abajo, las dosis homeopáticas se prestan para actuar con
más urgencia, por ser capaces de provocar una acción energéti-
ca y apropiada para los brotes agudos. esas dosis bajas, son los
medicamentos adecuados para la eliminación de los residuos y
toxinas orgánicas, pues drenan los órganos afectados y auxi-
lian también el trabajo de las altas dosis que, por ser remedio
de fondo constitucional, pueden provocar aumento de gravedad
momentánea en el estado del enfermo.
Las bajas dinamizaciones, además de su efecto local y
apropiado para los casos agudos, funcionan a semejanza de
verdaderas escobas que, a través de los riñones, de la piel o del
intestino, expulsan la sustancia residual enferma, desagregada
del cuerpo físico. Es por eso que el uso de la 5ª dinamización
se hace más común, pues es el tipo que mejor atiende a las ne-
cesidades generales y, por eso, es mui utilizada en los centros
espiritas. es la medicamentación intermediaria entre los casos
agudos y los crónicos; es la terapéutica cotidiana más común,
aunque se halle encuadrada dentro de los mismos principios de
la dosis infinitesimal elaborada por Hahnemann. Sin embargo,
cuando se trata, de una enfermedad de larga data, que afecta
hasta el temperamento del enfermo o desafía iá medicina aló-
pata, la curación definitiva sólo se efectúa por las altas dosis o
diluciones, las cuales, aunque sobrepasen la concepción huma-
na, son capaces de modificar el terreno temperamental y los
síntomas mentales del enfermo.
La 5ª dinamización, es la dosis más conocida y usada por
aquellos que todavía no están habituados a consultar al médico
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