Ramatís

del tabaco; encolanse a ellos como si fuesen moldes invisibles y  
procuran, por todos los medios, inhalar desesperadamente las 
emanaciones desprendidas del cigarillo. Sucede eso porque el 
tabaco, además de su característica volátil en el mundo mate-
rial, interpenetra las capas bajas del mundo astral, por poseer, 
como todo lo existente, su doble fluido, el cual es absorbido 
ávidamente por los desencarnados que consiguen sintonizarse 
con el aura de los fumadores encarnados.

Pero eso no los deja completamente satisfechos, ya que es 

muy reducida la cuota que pueden absorber en el eterismo del 
tabaco incinerado. entonces, echan mano del recurso de aci-
catear a sus víctimas para que aumenten su ración diaria de 
cigarros, en lo cual puede descubrirse la causa que origina que 
muchos fumadores digan que se sienten dominados por una 
fuerza oculta que les impide librarse del vicio de fumar.

es claro que esa desagradable sujeción a espíritus atrasados 

sólo puede ocurrir en aquellos que además del vicio esclavizante 
del tabaco, se entregan a deslices morales peligrosos que pueden 
atraer junto a sí, muchos desencarnados delincuentes y viciosos.

PREGUNTA: – ¿Todos los fumadores inveterados, después 

de desencarnar, sufren en el Más Allá los efectos perniciosos 
del vicio cultivado en la Tierra?

RaMaTÍS: – después de la desencarnación, es la ley de co-

rrespondencia vibratoria la que realmente regula el sufrimiento 
oel placer de cada criatura, de conformidad con su esclavitud o
liberación de los vicios de la carne. Por tanto, si el sufrimiento
causado por la imposibilidad de fumar, entre las almas desencar-
nadas, varía de acuerdo con el grado de su esclavitud al vicio del
tabaco. las personas que fuman accidentalmente o por deporte,
es decir, que solamente de vez en cuando toman un cigarro, no
contribuyen para la creación del deseo astral que más tarde las
podría acicatear con vehemencia, en el “Más allá”. Pero conviene
que sepáis que no obstante la bondad, el amor, la pureza, la re-
nuncia y la honestidad proporcionen a las almas desencarnadas
una situación de paz y entendimiento espiritual, ¡la nostalgia y
los estigmas de los vicios adquiridos en la Tierra, continuarán
acicateando su espíritu aunque sean dignas de admiración en el

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