Ramatís
te a sustentar, amparar y amar a su esposa e hijos, practica
una crueldad o acto moral censurable cuando abandona a su
familia por otra pasión irregular, o bien, se entrega al vicio,
transformándose en un marginado e improductivo. Pero, bajo
el cientificismo de las leyes creadoras y que disciplinan a cada
plano de vida y su accionar en los diferentes estados densos y
energéticos, el hombre para llevar a cabo el acto inmoral de
abandonar a su esposa & hijos, consume energía mental, astral
y etérea de cada plano correspondiente, hasta materializar físi-
camente el “abandono” a la familia. Es evidente que, antes del
hecho, se genera en el espíritu del hombre la voluntad o decisión
de abandonar a la familia, y secundariamente ello toma forma
y fuerza por el revestimiento energético en el cuerpo mental,
incorporándose bajo la condición de placer en el cuerpo astral,
de los deseos o sentimientos, para luego vitalizarlo en el campo
del doble etérico, que es el intermediario entre el periespíritu y
el organismo carnal.
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Consecuentemente, para que se concrete el abandono del
hombre a los deberes conyugales y paternos, se procesa todo
un sistema científico y gradual que va desde la matriz de su
espíritu, asentado en el plano espiritual, cuya “idea inmoral” se
impregna de energía mental, y prosigue en su desarrollo subdi-
námico, hacia abajo, debiendo revestirse de energía astralina y
reflejarse en el campo de las emociones. Finalmente, orillando
el mundo físico, la idea censurable del abandono, proyectada
por el espíritu, dinamizada mental y astralmente, se vitaliza por
medio de la energía “etéreo-física” del plano intermediario, que
liga al mundo oculto con el físico, hasta producirse material-
mente
en un accionar censurable bajo las leyes y la moral del
mundo físico.
En tal caso, el hombre incurrió en un acto “pecaminoso”
porque se sirvió malignamente de las fuerzas creadoras de la
vida y el amor, como son las energías mentales, astralinas y
etéricas, que deben utilizarse bajo la supervisión divina para
mantener estrechamente la unión con otros seres, y que deberá
reforzar con su responsabilidad, brindando amparo a sus fa-
2
En breve resumen, sabemos que el espíritu, o llama inmortal, acciona en el
mundo espiritual a través del organismo conocido por los esoteristas, yogas y
ocultistas.
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